oLA dE fRíO

El frío me encoge. No hablo sólo de determinadas partes de mi cuerpo. Hablo de todo yo, en cuerpo y alma. Ando algo apático, y con las ideas congeladas. Ayer, después de currar, me dio una pereza enorme acercarme a un concierto en el que tocaba mi hermana pequeña de hace unos pocos posts. Opté por largarme e casa a cenar sopita caliente y resguardarme bajo mi edredón. El viernes fui a cenar sabiendo perfectamente que me retiraría a mitad de la noche (sí, prometo que soy yo, y no un impostor que escribe haciéndose pasar por dEsoRdeN). Quizás también influyó la visita sorpresa de una tuna con la gracia en el culo, y el culo de vacaciones en Vladivostok (¿Todavía existe esta fauna de anormales? Tuno bueno, tuno muerto!!). Remató la noche una batalla campal entre un grupo de magrebíes y unos borrachos guiris en medio de Les Rambles, que acabó a golpes de bates de madera por parte de los primeros. Todo, casi delante de una comisaría de la Guàrdia Urbana. Flipé en colores. Suelo salir por allí, y nunca había visto cosa igual. Volviendo con S, no me salió el gesto ni de dejar pasar mi bus nocturno y acompañarla en el suyo. Y mira que en el fondo tengo ganas de que me pasen cosas emocionantes. Pero, quizás será la deprimente navidad, últimamente no tengo nada de ganas de mover un solo dedo por nada ni por nadie*...

*Bueno, por Norma Jean quizás sí estaría dispuesto a acabar con mi estado de perrería...