divendres, 31 d’agost del 2012

bLuE SumMeR





Nada como una escapadita a la Costa Brava para oxigenar la mente y olvidar miserias cotidianas. Este año me estoy resistiendo más que nunca a aceptar que el verano ya haya iniciado su cuenta atrás, y estoy en modo hacer cosas que prolonguen al máximo la sensación de vacaciones, aunque haga un mes que se acabaron. Han sido días divertidos, de olvidarse de relojes o internet, y de rodearse de gente más joven que te contagia sus ansias por vivir. Siempre me ha gustado rodearme de gente más joven. Porque siempre me he sentido más joven de lo que marcaba mi DNI; porque los amigos de mi quinta de toda la vida están más que casados, con hijos, y abocados a esa vida estándar y sedentaria que respeto pero no va conmigo. Y porque no me da la gana de aceptar sumisamente los absurdos roles y estereotipos que se les presupone a cada edad de la vida. Yo hago lo que me apetece, cuando me apetece y con quien me apetece, siempre que sea posible. Pero no soporto hacer las cosas porque toque. También es verdad que salir en determinados sitios con gente muy joven es incómodo. Por las diferencias obvias de comportamiento y madurez emocional, por el ambiente, porque uno ya no está para hostias (y menos con gallitos maleducados), y porqué puede dar pie a situaciones incómodas que te plantean reflexiones morales. Nunca he creído demasiado en eso de la moral, y prefiero regirme simplemente por el sentido común, pero supongo que a todos nos han inculcado determinadas pautas de comportamiento que están en nuestro subconsciente. Me ha gustado volver a la zona donde viví algunos de los veranos de mi adolescencia, y recuperar sensaciones de aquella época, y observar las diferencias con el paso de los años. Ese paso de los años que está tan presente en mi vida últimamente, por mi abuelo, por mis padres y por mí mismo. Muchas cosas han cambiado y ya nada volverá a ser igual, y ese es uno de los mayores conflictos a los que debe hace frente el ser humano a lo largo de su maravillosa y miserable existencia...




*Gracias a hiro por su inspiración musical para este post lleno de melancolía y pollos agridulces...



10 comentaris:

Cris ha dit...

Me ha encantado este post... principalmente porque he entendido ambas sensaciones, la del principio, el querer prolongar aquello que nos gusta, y la del final... será que ya me he hecho mayor del todo...

X ha dit...

Hoy no se habla de fútbol. xD

Pio ha dit...

Pues a mi, en estos últimos años me ha pasado al contrario, que cuando voy con gente más joven, me siento muy mayor.

Viajar y volver al lugar donde un día fuiste ya no feliz sino completo, es una sensación muy bonita y disfrutar de esas pequeñas cosas y ver que por mucho que cambiamos y comportamos seguimos teniendo algo dentro que vuelve.

Notamental: me he levantado un poco filosófica :P

hiro ha dit...

Yo también tengo tendencia a rodearme de gente más joven. La edad es algo subjetivo; he conocido a personas de 20 años que parecía que tuvieran 40. Aunque suene a tópico creo realmente que uno es joven de espíritu o no lo es.
Mis amigos de quinta también van casándose y teniendo hijos, pero yo no siento esa necesidad. Algunos pensarán que es por inmadurez pero es simplemente que, como tú, no me veo llevando esa clase de vida.
Decía Marisa Madiere, escritora que hace poco he descubierto, que "somos tiempo fosilizado", y tiene gran parte de razón. Al menos es lo que he sentido yo cuando he vuelto a los lugares de mi infancia.

Pd: gràcies per la menció! m'alegra que t'hagi agradat la cançó :D
Pd2: la pluja sucks!

begusa ha dit...


http://www.youtube.com/watch?v=rQi8wEHMm5Y

forever, forever, forever...
mmmm...

♥ La Haine ♥ ha dit...

Que ilusión pasarme por aquí... cuanto tiempo. Sé cuál esa esa sensación de querer alargar las vacaciones.. pero todo tiene su qué, no? :) saludos...

dEsoRdeN ha dit...

Gracias, Cris. Para bien o para mal, el maldito tiempo no para; y si nos descuidamos, nos deja atrás...

Lo que quieras, X! ¿Qué prefieres? ¿Hablar del baño en la 2ª parte al cagón de Mou jugando sólo con 10? ¿De la carita de restreñido de CR7 mirando el premio al mejor jugador de Europa de Iniesta? ¿Del baño del Atleti a la infamia antifutbolística del Chelsea? ¿O de los 5 puntos que le llevamos al Equipo del Mal en la liga...? XD

Tú lo has dicho, Pio: lo de mayor o menor es algo que uno siente dentro. Y tampoco es exactamente que me sintiera especialmente feliz o completo en aquél sitio y aquella época, pero me gustó recuperar sensaciones :)

Puto frío, C! Ya tengo los primeros síntomas de constipado :S Somos gregarios a más no poder, por muy independientes que nos queramos sentir muchas veces

100% de acuerdo, hiro. Y las circunstancias de cada momento te ayudan a mantener ese espíritu o te hacen perderlo. Me parecen tremendamente ridículos los que asocian no hacer una vida estándar con la inmadurez. Pobres cerrados de mente...

...and ever and ever and ever, begusa :)

Celebro que vuelvas, La Haine. Yo me quedaría eternamente de vacaciones, no tengo ninguna duda

abrazos en los brazos

tan solo una cerilla ha dit...

los mejores veranos de mi vida (o parte de ellos)han sido en la Costa Brava
uno de mis grupos de cabecera es la Costa Brava y es que cada playa tiene sus cosas, pero esa es para ser feliz

nota mental: digo eso de "mama no quiero ir al cole" todos dias antes de ir a trabajar, por esa cancion precisamente

yo, la reina roja ha dit...

Las vacaciones de verano son mi mejor época. No paro, no me aburro y estoy más cerca del mar. :-)
Por cierto, qué recuerdo más bueno tengo de "Verano azul"...

dEsoRdeN ha dit...

Yo de pequeño veraneaba con mis padres en un camping de Calella de Palafrugell, Cerilla. Esa zona es preciosa. Y no conocía esa canción hasta hace unos días, cuando hiro me la descubrió

Coincido de pleno, reina roja! Las vacaciones son el estado natural del ser humano. La esclavitud laboral es un puto invento del sistema para tenernos ocupados, sin pensar, y proporcionándonos unos ingresos mínimos para que podamos consumir. Incluso los más cretinos se sienten realizados trabajando, pobrecitos. 'Verano Azul' molaba, claro que sí (todos mis amigos estábamos enamorados de Bea...)