NaSty WeekeNd

Ha sido un fin de semana raro. Demasiado curro, que encima no me tocaba a mí. Demasiado stress. Un encuentro con una estrella mundial no fue como hubiera querido. La mierda-lluvia. Maldito frío again. Muchos gastos acumulados. Una hora menos para dormir. Dos colegas que se han echado novia no vinieron al concierto soberano, y aunque estuve con éste y aquél y el de más allá, no pude evitar cierta sensación de soledad. Casualidad o no, hoy he leído por azar un artículo que decía que los 'singles' volvemos a ser 'solterones'. Cosas de las modas, supongo. Y he vuelto a pasar de llamar a la M Sidecar porqué me daba pereza. Hace 3 o 4 semanas que le dije "la semana que viene", pero nunca me acaba de apetecer. Puede que se haya cagado en mí y tendrá toda la razón, pero nunca me ha gustado hacer cosas por compromiso. Debo ser demasiado humano como para poder evitar el egoísmo o la dejadez.

Suerte que esta semana veré por primera vez a AC/DC y por enésima a Mando Diao, siempre atentos al rescate de espíritus agrietados. Necesito sobredosis eléctrica, y también un buen polvo, a ser posible con desconocida. Por aquello de la sobreexcitación de las primeras y misteriosas veces. El sexo es tan tremendamente liberador. Y yo llevo un par de días tenso, angustiado. Sensaciones recurrentes. Mucho menos que antes, pero siguen sacando la cabecita. Y encima sigue lloviendo. La vida sería maravillosa si no lloviera nunca más. Y sin frío. Y sin tener que trabajar. Y dedicarse única y exclusivamente al placer; y a los deseos y los gustos. Y a todo aquello que nos haga felices. Que es una utopía tan estúpida como cualquier otra. Suerte que éstos me hicieron reír una vez más con su show en un abarrotadísimo y sudoroso Sidecar...