divendres, 24 de juliol del 2015

sCaNdinAViaN nO-LoVe




Poco más de un día para que se acaben las vacaciones. Calor infernal. Incluso hasta para mi es excesivo. Vuelvo de casa de mis padres, donde he estado chafardeando entre las cajas de diapositivas antiguas. Sí, últimamente me ha dado mucho por mirar atrás, y recontactar con gente a la que quiero aunque lo disimule por el tiempo que hacía que no sabía nada de ellas (sí, me doy cuenta que hablo básicamente de chicas; las suelo echar más de menos a ellas que a ellos; debo ser un puto sexista discriminador del subgénero masculino). En el metro y por las calles hay ambientazo, mayoritariamente de guiris haciendo el guiri en la ciudad de los guiris haciendo el guiri. Me pongo cachondo. No me malinterpretéis (sí, ya sé que mis amigos me llaman Ministro de Asuntos Exteriores por mi tendencia a buscar el apareamiento con hembras venidas de fuera, pero si fueráis un tío y tuviérais que lidiar con cada estúpida engreída con aires de princesa que corren por aquí, entenderíais mi tendencia natural e instintiva a huír de tanta arpía local y buscar la espontaneidad foránea). Sea como sea, hablaba de ponerme cachondo de vida. De ver tanta vida ahí afuera que me dan ganas de colarme y mezclarme e interactuar con todas esas pequeñas historias de gente que vive a miles de kilómetros y el bendito azar me las ha puesto a mano, como un regalo por desenvolver para ver qué hay dentro. Es ESA misma excitación la que me hace llegar a casa y pensar que no es aquí donde quiero estar ahora mismo.

Me doy una ducha rápida, me da palo afeitarme y me dejo la barbita guarra de 4 días, estreno mi nuevo polo de pequeñas calaveras que me enamoró nada más verlo (con lo especialito que soy yo para la ropa, a no ser que se trate de camisetas de grupos de música...), y en plena madrugada, me vuelvo a ir. Bueno, antes me sirvo un whisky & cola en casa, que es buena compañía en estas improvisadas escapadas solitarias de madrugada, en búsqueda de hedonismo y diversión. Cualquier cosa que me sirva para escapar de la mediocre rutina de este mundo de imbéciles, egoístas, cretinos y gentuza exhibicionista que cuelga las fotos de sus vacaciones en facebook, como si a lo demás nos importara una mierda. Ser amigos de facebook no significa necesariamente ser AMIGOS de verdad (si es que eso existe), y mucha gente parece obstinada en no darse cuenta de ello (o quizás prefieren ignorarlo porqué no son capaces de asumirlo). Y un sitio donde me siento como en casa y donde me siento realmente FELIZ, ni que sea por unas horas de burbuja de realidad, es en el Sidecar. Sí, ya pueden pasar los años, y puedo tener épocas de ir más a un sitio o a otro, pero uno siempre acaba volviendo. Habrá días mejores y otros peores, pero en pocos sitios disfruto tanto con la música, el ambiente y los bailes como en el viejo Side (así le llamaba la A-Lombarda, y como soy un capullo que en el fondo sigue teniéndole estima por mucho comportamiento de loca inestable que me tocara sufrirle, a veces también le llamo así). Hoy con la entrada, aparte de la copa habitual, también te regalan un cocktail hawaiano, acorde con la fiesta que se celebra, así que empiezo por quitarme eso de encima por si es una mierda, y luego tapar el hipotético mal sabor con mi whisky & cola que me salvaguarda de todos los males etílicos (sin resaca, sin estómago revuelto, sin efecto helicóptero -a no ser que pierdas la noción del tiempo, el espacio y el cálculo de alcohol ingerido). El cocktail es bebible, pero tampoco lo apuro. Se nota que es julio, porqué hay más gente de la habitual entre semana, y se ven unas cuántas caras foráneas (bueno, eso tampoco es tan extraño). La segunda canción ya es el 'Drácula Ye-Yé', así que esto pinta bien. Me encanta emborracharme de canciones. No necesito haberme bebido el Nilo para sentirme 'borracho' si me ponen música que me pone el alma más dura que el palo de un semáforo. Me dejó ir enseguida, y me pongo a bailar con una sonrisa en los labios y mis pies haciendo extraños movimientos que provocarían esguinces de córnea a quien intentara seguirlos con la vista. Una vez el fotógrafo de la sala me dijo que le gustaba hacerme fotos porqué daba muy buen rollo, y admito que me gustó el elogio. Y no, no creo que me estuviera tirando los trastos.


Tras varios cambios estilísticos que me rompen un poco el ritmo, voy a la barra a pedirme un cubata. Me atiende la camarera morena. La otra lleva una camiseta de tirantes ceñidísima que le marca unas tetas que necesitarían de una ampliación de la sala para que pudieran respirar y desplegarse en toda su magnitud sin agobios. Vuelvo a la pista y me pongo a bailar discretamente en un lado, que es como empiezo siempre antes de sacar las alas a volar. Tengo cerca a 3 chicas con cara de locales, y me fijo en la más bajita. Su amiga más alta baila con ella y me rodean con ambos brazos. Me pongo a bailar primero con la más alta, y luego con la más bajita, pero el DJ corta la canción y, de paso, el rollo. La corriente natural del baile me lleva al lado de una de las rubias que es evidente que no son de aquí, así que pregunto directamente "where are you from?". "Finland", me dice con una sonrisa, y nos ponemos a hablar con una naturalidad por su parte que se me enamora el alma, que diría la folclórica del bigote (esa canción es suya, no? Ahora dudo...). La conversación da paso a la siguiente fase, donde me siento realmente cómodo y feliz: el baile. Y la jodía baila bien. Desenfadada, decidida, tomando también iniciativas... cada vez que nos decimos algo no hay espacio vital que valga, y los arrambamientos rozan lo obsceno. Me encanta, no hace falta decirlo. Mira que me molesta que invadan mi espacio vital cuando voy por la calle, o en el metro, o en cualquier tipo de espacio público. Siempre tengo la sensación de que soy invisible a ojos de los cretinos. Siempre acaban acercándose a centímetros de mi, de mis pies, de mi nariz... en situaciones que ponen a prueba mi capacidad de autocontrol batallando con mis deseos cruentos de reventarles su cuerpo invasor con el primer objeto contundente que tenga a mano: un paraguas puntiagudo, una maleta, un carrito de bebé con niño incluído... pero en esta ocasión, me encanta que La Chica Venida del Hielo se mee en nuestras fronteras carnales.

Tras una hora de charla, risas, bailes, invitaciones a Helsinki y copas compartidas, de cantarle 'Are You Gonna Be My Girl?' tocándonos nariz con nariz, y de morderle literalmente el cuello sin reprobación alguna, se va un momento al baño. Y surgida de la nada, en un rápido movimiento depredador, reaparece la española del principio (la más alta). Me coge para bailar nuevamente, y se me lleva a un lado, mirándome fijamente, en una clara danza de la seducción propia de una Viuda Negra. Mecagontodosmismuertos. Hay días que sales con la idea clarísima de buscar sexo, te afeitas, te arreglas y disimulas todo lo que puedes tu dEsoRdeNada estética desgastada por los años, y no pillas ni p'atrás. Y hoy que has salido con menos aspiraciones, desaliñado, y con la simple idea de diversión y huída de la realidad que se te viene encima, te debates entre dos opciones claras y apetecibles. Yo, gilipollas de mi, tengo un microdebate interno de 1 segundo tras un conato de lanzarme a la boca de la Viuda Negra, y opto por la coherencia y la honestidad: he estado una hora trabajándome a La Chica Venida del Hielo, y la voy a esperar donde le he dicho, para rematar la faena, por muy tentadora que sea la otra opción. Craso error, visto lo que se verá después...

Y es que, cuando uno lo pasa bien, el tiempo vuela, y al poco de volver mi escandinava, las luces se encienden y la música se apaga. Se reagrupa con sus amigos, salimos todos, y cuando estamos ella y yo en la puerta, a una de sus amigas que llevaba cara de rallada en el interior, le da un ataque neurótico de berrinche infantil por razones que desconozco. La Chica Venida del Hielo se va detrás de ella (si es que es hasta buena amiga! Cómo queréis que no me microenamore de ella esta noche?) y se ponen a hablar, con evidentes muestras de tensión por parte de la neurótica Perra de La Hortelana. Yo no entiendo nada, y cuando se largan a paso rápido a una de las calles que va a dar a la plaza, me voy detrás de ellas, como reclamando instintivamente derecho de pernada. Bueno, básicamente lo que quiero es que la puta loca de la amiga no nos joda la noche tan jodidamente genial que estábamos pasando hasta ahora. Y más teniendo en cuenta que es la última noche en diSoRdErLand de La Chica Venida del Hielo, y de aquí a unas horas dormirá a escasos 3.500 kilómetros de mi cama, que es donde quiero que duerma (o no sólo eso) esta noche. Tras una persecución de un par de calles propia de una peli de San Francisco pero en vez de con coches dando botes, derrapando a pie, la llamo. Se frena, se gira, viene hasta mi, y me dice: "I'm sorry; it's a difficult situation. I've had a wonderful night". Me mira con cara apenada, me abraza, y puede que hasta incluso me dé un beso fugaz que ya ni siento, de la explosiva mezcla de incomprensión, descoloque y rabia, tremenda rabia que siento hacia la zorra de su amiga que nos acaba de chafar el plan. MI escandinava se va corriendo tras ella, y yo me quedo allí plantado, con cara de gilipollas, sin escandinava, sin número de teléfono, sin contacto de facebook, sin viaje a Helsinki con ella de pornoguía... sin nada de nada. Vuelvo hacia la plaza, y para más inri, me cruzo con la Viuda Negra, que se va junto a un barbotas modernito. Me ve, se para, nos decimos algo, me hace el gesto de 'give me five', y nos deseamos buenas noches. Buenas noches su puta madre, porqué me voy a casa con una mala hostia y una sensación de boicot universal y de "por qué cojones siempre me tienen que pasar estas cosas a mi?". Es lo que tiene el dEsoRdeN, supongo. Y cuando me pasan cosas dEsoRdeNadamente positivas no me quejo, también es verdad. Al final, otra Historia Que Pudo Ser Maravillosa Y No Fue para la colección.  Pero la semana que viene vuelvo al lugar del crimen a quitarme la espinita...


PD: Una de la madrugada. Todavía medio muerto de anoche. Mañana vuelvo a currar tras las vacaciones. Y recibo un mensaje tentador para salir a hacer el mal. A la misma plaza de ayer. A veces es taaaaaaaannnnn duro ser dEsoRdeNado...


8 comentaris:

ALOMA69 ha dit...

Plaza de placeres prohibidos... Yo era más de ir al Karma, pero también me gustaba el Sidecar.


El mejor lugar del mundo para pecar.



dEsoRdeN ha dit...

Es estar en esa plaza y sentir la vida correr por las venas, verdad Aloma69? Grandes recuerdos, y muchas páginas por escribir aún allí...

hiro ha dit...

Vaja mala sort!! t'hauries d'haver quedat amb la Viuda negra, encara que jo hagués fet el mateix, tinc debilitat per les noies guiris (i com més del nord millor).
La nit següent va anar millor? ;)
Espero que la tornada al curro no hagi estat gaire dura... Per sort les festes de dEsoRdeRland estan al caure :D

Ivette ha dit...

Me quedo por este rincón. Te invito al mio: http://parasolesvioletas.blogspot.com.es/

dEsoRdeN ha dit...

Com a Ministre d'Afers Exteriors, no vaig poder evitar la meva tria errònia (per factors externs, això sí...); les nits es van acumulant i ja no acabo de tenir clar quina és quina... XD (és l'edat). Diumnge a la tarda va ser una mica dura, però en fi, ja queda un cap de setmana menys per agafr les vacances de 2016! Dues setmanetes, i Festes!!

Bienvenida, Ivette; ya chafardearé tu blog...

Pio ha dit...

Jajajajajajajajajjajajaja el karma, el karma, que puñetero es XD

dEsoRdeN ha dit...

A mi no me hizo puta gracia esa noche, jajaja!! XD

dEsoRdeN ha dit...

A mi no me hizo puta gracia esa noche, jajaja!! XD