oN thE SofA: tHe bOat ThAt RocKEd

Este es el espíritu, baby. Y lo echaba de menos. Estaría en letargo, por este puto frío que ya está llegando. Sí, amiguitos: ha llovido tras una mañana de sol deslumbrante, así que ya sabréis qué tarea doméstica ha hecho esta mañana el dEsoRdeNado más grande a este lado del mercado. Pero poco importa eso, porqué I'm back. He estado con la K del morbo, y no sé quién ha tonteado más con quién. Seguramente nadie, pero me gusta más imaginármelo así. No hemos llegado a hacer manitas (no será por falta de ganas, pero delante de su novio habría sido poco elegante), así que me he conformado con una tarde de hacer el manitas; algo que se me da horriblemente mal, pero que hemos solventado con un bien alto. Luego le he dado calabazas a un bomboncito algo creído y calientabraguetas, que siempre será más fino que decir calientapollas. Pero en el fondo es buena gente, y la aprecio. Hoy me apetecía más estar conmigo, porqué a veces más vale malo conocido, que dice el refrán. Creo mucho en los refranes, y en la sabiduría popular. Sobretodo en la políticamente incorrecta. Como la del tipo del gas que ha venido a revisarme la instalación. Un freaky chistoso y peculiar, de esos que forma parte de la 'common people' con la que tengo tanto y tan poco en común. Pero orgulloso de serlo, o de no serlo, he ahí la cuestión. Con ganas de quemar noches, hacerme un bonzo interior, y reírme de esta historia tan absurda que nos ha tocado vivir. No es culpa mía, sino de estas guitarras diabólicas que me hacen decir sandeces y 'auanbabulubabalambambús!'. Este es el espíritu, baby. Éste es el espíritu...