Mesas fuera de sitio, ropa en el suelo, olor a semen (me gusta ese olor), y la música sigue sonando, aunque la casa esté algo más vacía que hace un rato. Ha pasado lo que no quería que pasara, porqué esto va así. Mientras escuchábamos al grupo de gente tocar y cantar en el bar, me había puesto el escudo, pero los pantalones se me han caído con la cerveza. Maldita cerveza. Y malditos pantalones de caída fácil. Quería sentirme fuerte, implacable ante la tentación, pero he sido incapaz. Lo habría conseguido en otras circunstancias, pero hoy necesitaba algo así. Más por dentro que por fuera, por pura supervivencia mental. Necesitaba una de las habituales venganzas vitales. Necesitaba un chute de autoestima. Necesitaba olvidar. Necesitaba tapar mis vacíos gruyere. Necesitaba escuchar cosas que otras que quisiera no me dicen. Aunque luego sienta de veras ser tan frío, y no responder como ella seguramente querría que respondiera. Pero ni puedo ni quiero hacerlo. Me niego a engañar a nadie. Por eso no quiero ir más allá en esta historia; porqué cuando le he preguntado si esto era también para ella un divertimento, me ha dicho que no. Sé lo que es estar en ese otro lado del ruedo, y no quiero provocar cosas que a mi me han hecho sufrir en otras ocasiones y con otras compañías. Por eso quería que no pasara otra vez. Pero por mucho que me niegue a vender humo ni a llenarme la boca con palabras de encantador de serpientes, sigue queriendo, y me dice que ya le está bien así. Aunque su mirada me dice otra cosa. Todo es tremendamente complicado, y somos grandes culpables; y mi vida sentimental es una auténtica mierda...
divendres, 18 de setembre del 2015
tOdO mE sALe aL ReVéS
Mesas fuera de sitio, ropa en el suelo, olor a semen (me gusta ese olor), y la música sigue sonando, aunque la casa esté algo más vacía que hace un rato. Ha pasado lo que no quería que pasara, porqué esto va así. Mientras escuchábamos al grupo de gente tocar y cantar en el bar, me había puesto el escudo, pero los pantalones se me han caído con la cerveza. Maldita cerveza. Y malditos pantalones de caída fácil. Quería sentirme fuerte, implacable ante la tentación, pero he sido incapaz. Lo habría conseguido en otras circunstancias, pero hoy necesitaba algo así. Más por dentro que por fuera, por pura supervivencia mental. Necesitaba una de las habituales venganzas vitales. Necesitaba un chute de autoestima. Necesitaba olvidar. Necesitaba tapar mis vacíos gruyere. Necesitaba escuchar cosas que otras que quisiera no me dicen. Aunque luego sienta de veras ser tan frío, y no responder como ella seguramente querría que respondiera. Pero ni puedo ni quiero hacerlo. Me niego a engañar a nadie. Por eso no quiero ir más allá en esta historia; porqué cuando le he preguntado si esto era también para ella un divertimento, me ha dicho que no. Sé lo que es estar en ese otro lado del ruedo, y no quiero provocar cosas que a mi me han hecho sufrir en otras ocasiones y con otras compañías. Por eso quería que no pasara otra vez. Pero por mucho que me niegue a vender humo ni a llenarme la boca con palabras de encantador de serpientes, sigue queriendo, y me dice que ya le está bien así. Aunque su mirada me dice otra cosa. Todo es tremendamente complicado, y somos grandes culpables; y mi vida sentimental es una auténtica mierda...
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4 comentaris:
Ay, es bastante complicado comentar esto o dar un simple consejo, pero antetodo mucho cuidado con cualquier paso que des, es demasiado dificil saber si lo harás bien, decidas lo que decidas
Besets
Billie.. ains
Més enllà, i perquè entenc perfectament com es sent, si te l'aprecies i ella no és capaç de veure ara per ara que aquest joc no li fa cap bé si ha deixat de ser un joc per ella, posa tu les barreres. Li faràs un favor. En qualsevol cas, el que diu la Pio té raó, és difícil
una abraçada
Uf, pues sí suena bastante complicado. Pero nada por lo que más de la mitad de la población mundial no haya vivido en más de una ocasión.
Por lo general, todo lo anterior se soluciona una vez que te encaras a ti mismo con preguntas que quizás no has querido formularte; o cuando llega a tu vida la persona indicada (ojo, yo nunca digo "tu otra mitad", porque no creo en eso).
Estoy segura que pronto saldrás de estas confusiones ontológicas, Desorden.
Te mando un beso.
La vida es tremendamente complicada, Pío; o al menos así la acabamos haciendo...
En això estic, Gemma; a vegades puc ser molt maldestre per torpesa, però no actuo mai de mala fe, si no és com a resposta a una mala fe aliena prèvia
Cosas que pasan, Siberiana. A priori no me dan miedo las preguntas, ni tampoco las respuestas. No he tenido mucha suerte con las personas indicadas. Gracias, guapísima. Se te quiere desde el anonimato al otro lado del Atlántico
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