Con aquél puntito de alegría, pero sin dejar del todo la sobriedad. El ruido de la calle va remitiendo, y de momento parece que hoy sí que se podrá dormir tranquilo. El conciertillo popular ha estado muy bien, con una banda con tablas y con un repertorio de versiones muy bien elegido. M-Pop estaba muy animada, y su amiga que me sonaba de algún festival y su pareja nos han hecho un aclarado final en bandeja, a dos minutos de mi casa... pero no sé qué narices me pasa, que parece que haya perdido el instinto. El sí-pero-no revolotea mi cabeza, y no acaba de dejar que me sienta suelto y con el desenfado habitual. Hay veces que no me entiendo a mí mismo. Mañana iremos al concierto de The Pains Of Being Pure At Heart, pero creo que sigo sin tener claro qué narices quiero de esta historia...
8 comentaris:
Good love is on the way!
Estas cosas no se deciden con la cabeza, por muy tópico que suene... Que el desorden esté contigo. Beso.
Que me parece que te entiendo. Me parece que me pasa lo mismo.
¡Hay que entrar a matar!
t'entenc molt i molt bé... i per tant no et puc aconsellar, jeje
Ya sabes, adorado, que hay cosas que no son claras. Toma lo que te de esta historia, y disfruta lo bueno.
Ando con poco tiempo, pero no me gusta dejarte abandonado
Un besote!
Uf! Esa palabra me suena muy fuerte, siberiana. Siempre me ha dado un poco de respeto, porqué me parece que la usamos muy a la ligera. Algo hay, perooo...
Totalmente de acuerdo, bellota. Y suerte que es así!
¿Tendremos la cabeza llena de expectativas irrealizables, raquel? Mmmm...
Si nunca he tenido problema para eso, X; al contrario, más bien he pecado de ser demasiado lanzado muchas veces. Pero no sé qué pasa en este caso, que no me sale de dentro...
S'agraeix l'empatia, però, moonlight... :)
He optado por esa actitud, Tani. Si tiene que pasar algo, pasará; y si no, a disfrutar de lo que dé!
sueños húmedos tengáis
Estoy cansada. De lo irrealizable. De lo que no es como me gustaría. De las ambigüedades varias en situaciones inoportunas. He llegado a mi tope personal. El sí-pero-no es una pesadez infinita.
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