pUeS CoMo 2010 nO eSPabiLe, mENudO TimO...

He empezado el año extrañamente calmado. Más por pereza y por circunstancias que por ganas, pero a veces la realidad es la que es. Y ya me pasó la época de hacerme mala sangre por ello. Hay cosas que me dan rabia y me provocan impotencia, porqué mi naturaleza impulsiva es de saltar ante las cosas que no me gustan, pero quiero seguir el precepto que pregonaban los Siniestro Total; y es que, ante todo...

Y sigo sin soportar las situaciones de tensión y conflicto. Me hacen sentir tremendamente incómodo. Sí, ya sé que son inevitables, y que hay que apechugar con ellas, pero haré todo lo posible para rodearlas. Estoy harto de la hostilidad y la mala folla que presiden el mundo, y me he propuesto enseñar la cara más amable que pueda en todo momento, aunque sé que no será fácil. Y lo hago porqué me sale de las narices, y me da igual que sea 1 de enero o 37 de febrero.

Y a todo esto, me ha venido la morriña: hace justo un año que conocí a Canadian J y empezó una breve pero fantástica historia que no acabo de aceptar que se terminase como tal. Mantenemos el contacto, pero 9.000 kilómetros son demasiados para únicamente una voz o unos textos. Y voy mirando al pasado reciente de la época bloguera, y la A lombarda está en Islandia; y M esperando un niño de otro; a otras letras les he perdido la pista; y mi E platónica... echo tanto de menos nuestras noches de cenas y dEsóRdeNes. Una de las mejores épocas de mi vida, al menos en este sentido, y a pesar de todo lo que nos quedó por hacer. Y ante la nueva condición de salchichón que me han regalado mis amigos y sus nuevos apéndices, creo que empiezo a necesitar cómplices para sentirme vivo y bailar como negros poseídos hasta el amanecer a ritmos de Northern Soul*... ¿os apuntáis al dEsoRdeN?

*Cada vez que escucho soul, me siento negro negro... (say it loud!)