dEsoRdeN teMPoRaL

La época de austeridad nocturna me está sirviendo para ahorrar algo y dormir mucho. La era glaciar parece haberse instalado en diSoRderLand, aunque aquí no ha nevado. Bueno, dicen que en alguna parte de la ciudad han caído 4 copos, pero yo no he visto ni medio; así que, para mi, es como si no hubiera nevado. Ayer cogí el Delorean y retrocedí 12 años: primero, para reencontrarme con antiguos compañeros de facultad (y sus muchos, excesivos, hijos...); y luego, para reencontrarme con antiguos compañeros de mis inicios laborales. Y, una docena de años después, volví a tener un deja vu de sensaciones increíble. Es alucinante el poder que tiene la mente para devolverte a estados de ánimo/sensaciones que parecían enterrados en lo más hondo de tu psique, con tan solo volver a ver a alguien, o volver a un lugar de tu pasado, reescuchar una canción, etc. Cuando volvía en tren, me parecía ser 12 años más joven, yendo hacia casa de mis padres (que entonces era también mi casa), y pensando con quien saldríamos esa noche a pillar una cogorza de postadolescencia tardía. Me fascina la mente humana. Sus mecanismos, sus efectos, sus reacciones...

Al final E-Platónica me llamó el último día. Sabía perfectamente que yo curraba ese día, aunque también es cierto que es bastante despistada. En fin, tampoco me comeré la cabeza ni cogeré ningún berrinche. Ya serían demasiados en este caso, y probablemente tampoco se merezca tanta atención. Sabe mal, pero es así. Hace unos pocos días me encontré por el barrio a La Chavala de la Peca, y me dio la sensación que estaba picada porqué no nos veíamos desde Fin de Año. Aunque me pueda saber un poco mal, tampoco es que me quite el sueño. No creo que tenga ninguna razón para estar enfadada: primero, porque somos amigos, y punto (el sexo puntual no cambia en absoluto ese estado, bajo mi punto de vista). Segundo, porqué tampoco ella me ha llamado en ese tiempo (bueno, miento: lo hizo la semana pasada, a las tantas de la madrugada, y cuando yo ya me estaba metiendo en la cama, en día antes de currar). Y tercero, porqué mi estado de hibernación asocial lo ha sido para todo el mundo, sin excepciones ni diferencias de trato. Es curioso, porqué una parte de mi tiene ganas de salir, y otra quiere alargar al máximo esta etapa de calma, sofá y manta. Y ya os digo que mientras siga haciendo este clima de mierda, y no haya nada ni nadie en el horizonte que me estimule lo suficiente, ganará el sofa & manta lifestyle. Curiosamente, una persona que ahora mismo podría cambiar esta dinámica sigue bastante conectada conmigo vía redes sociales. Pero no acabo de tener muy claro que L de Lesbiana pueda ser una chica capaz de tomar este tipo de iniciativas. Y yo ahora mismo estoy en fase pasiva, mira tú por donde...