Tras la tormenta estomacal, viene la calma. Calma, que es lo mismo que decir vorágine. Estos días me he dado cuenta. Supongo que normalmente, cuando estás metido en estos procesos de hiperactividad, caos y 1000 historias en la cabeza, dejas de lado cosas que te ocuparían tiempo y espacio de tu memoria RAM. Pero que luego resultan ser las más importantes de la vida. Es increíble cómo las espirales de rutinas cotidianas nos ponen vendas en los ojos, y establecen un absurdo orden de prioridades en tu cabeza y tu agenda. Estamos locos. Este ritmo de vida que llevamos no es normal. Ni saludable. Es inhumano, para ti y para los que te rodean, que quedan relegados a un segundo plano, cuando no debería de ser así. Estarse una semana parado da para pensar bastante. Por mucho que virus y fármacos no te dejen tener la cabeza muy lúcida. Pero hay cosas que no necesitamos reflexionar, y sí sentir. Y todos deberíamos bajar el ritmo, y disfrutar más de las pequeñas cosas de la vida. Y de las personas que nos rodean. Y de las que nos quieren, en mayor o menor grado, o en calidad de tal o de pascual. Me he hecho la propuesta de vigilar más esta faceta de mi vida, y de tener los ojos más abiertos, y de cuidar mejor mis relaciones... aunque eso no es fácil cuando tienes un carácter tan disperso e individualista. Y, probablemente, en 2 o 3 días de curro ya me habrán vuelto a abducir con sus dinámicas de vértigo, y todos estos buenos propósitos se irán por el desagüe con la fuerza de ese tsunami que nos dejó a todos en estado de shock. M-nipona sigue sin contestarme al mensaje que le escribí el viernes, pero como soy optimista de nacimiento, supongo que es porqué tiene problemas con las comunicaciones. Canadian J tampoco sabía nada de ella hasta ahora, pero me soltó que una de las chicas que me presentó en París se había suicidado a lo Ian Curtis. La vida es terriblemente cruel, y no tiene ningún sentido intentar entenderla...
dilluns, 14 de març del 2011
pAPá, nO CoRRaS...
Tras la tormenta estomacal, viene la calma. Calma, que es lo mismo que decir vorágine. Estos días me he dado cuenta. Supongo que normalmente, cuando estás metido en estos procesos de hiperactividad, caos y 1000 historias en la cabeza, dejas de lado cosas que te ocuparían tiempo y espacio de tu memoria RAM. Pero que luego resultan ser las más importantes de la vida. Es increíble cómo las espirales de rutinas cotidianas nos ponen vendas en los ojos, y establecen un absurdo orden de prioridades en tu cabeza y tu agenda. Estamos locos. Este ritmo de vida que llevamos no es normal. Ni saludable. Es inhumano, para ti y para los que te rodean, que quedan relegados a un segundo plano, cuando no debería de ser así. Estarse una semana parado da para pensar bastante. Por mucho que virus y fármacos no te dejen tener la cabeza muy lúcida. Pero hay cosas que no necesitamos reflexionar, y sí sentir. Y todos deberíamos bajar el ritmo, y disfrutar más de las pequeñas cosas de la vida. Y de las personas que nos rodean. Y de las que nos quieren, en mayor o menor grado, o en calidad de tal o de pascual. Me he hecho la propuesta de vigilar más esta faceta de mi vida, y de tener los ojos más abiertos, y de cuidar mejor mis relaciones... aunque eso no es fácil cuando tienes un carácter tan disperso e individualista. Y, probablemente, en 2 o 3 días de curro ya me habrán vuelto a abducir con sus dinámicas de vértigo, y todos estos buenos propósitos se irán por el desagüe con la fuerza de ese tsunami que nos dejó a todos en estado de shock. M-nipona sigue sin contestarme al mensaje que le escribí el viernes, pero como soy optimista de nacimiento, supongo que es porqué tiene problemas con las comunicaciones. Canadian J tampoco sabía nada de ella hasta ahora, pero me soltó que una de las chicas que me presentó en París se había suicidado a lo Ian Curtis. La vida es terriblemente cruel, y no tiene ningún sentido intentar entenderla...
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9 comentaris:
Si es que cuando encontramos solo un ratillo para poder pensar, es cuando nos asaltan los buenos propositos, lo malo es que como bien dices, en 2 dias se han olvidado.
Yo lo intento, intento disfrutar de lo bueno, de lo pequeño, de lo que tengo, y funciona ;)
Me alegro que estés recuperado. Tambien viene bien darse un caprichito a modo de viaje de vez en cuando eh :P
Yo últimamente pienso mucho en esto, casi no tengo tiempo para nada y hay que parar un poco y replantearse prioridades. Hay que sacar tiempo para tirarte al menos 10 minutos boca arriba y pensar un poco.
:)
joder se me ha puesto la piel de gallina con lo de la amiga de Canadian J. 3.600 muertos van ya...
Pero pasando de lo trágico a lo alegre, ya que estás en un momento dadivoso aprovecho para decirte que me iría la mar de bien que me regalaras un diván para mis cigarrillos con boquilla larga, ya que en el sofá que tengo no queda demasiado elegante. Se que estarás receptivo a mi petición.
Atentamente
Con cariño y respeto
Amapola Domingo.
Amen.
A mil por hora, semidespierto cuando duermes y semidormido cuando estás despierto, muchas cosas rápido, mal y pronto. Y las cosas más importantes sin hacer.
Que no que no es vida.
es que cuando paramos vemos el tiempo que dejamos escapar por entre los dedos.....mmmm si me ha salido esto muy profundo...
La vida es lo que es. Espero que la recuperación siga su proceso. Bs.
No puedo estar más de acuerdo con los primeros párrafos. Yo tb ando pachucho pero hasta dentro de más tiempo no estaré completamente curado. Cuando supere esto sabré apreciar los pequeños placeres de la vida más que nunca, y no quejarme tanto.
Y sí, el ritmo de vida que llevamos no es normal.
Solemos tener lo mejor en los morros, y no nos damos cuenta, sandra. Qué inútiles! Pues en un mes estaré por allí... ;P
No soy mucho de pensar en complots ni tramas, pero a veces parece que a alguien en las más altas esferas le convenga tenernos así de estresados y entretenidos, ardilla. Narcosis por exceso de ocupaciones...
Es muy heavy, amapola :( Un diván, me pide la tía! Ni que fueras mi querida! (que te quiero mucho, eh? Pero a la manera dEsoRdeNada) XD
"semidespierto cuando duermes y semidormido cuando estás despierto"... cuánta razón, bellota. No, no es vida. Y sí, somos unos merluzos por aceptarlo...
Profundo pero cierto, Pio
Hoy ya he comido chocolate, 8 días después, Reina Roja. Así que supongo que ya puedo decretar que la normalidad estomacal ha vuelto (ja era hora, collons!)
Espero que no sea nada grave, NaoBerlin :) Yo también soy de quejarme mucho, pero quiero pensar que es porqué tenemos espíritu crítico. Y eso es bueno, no? :D
masajes
Uhhhh avisame con tiempo para que no haga planes, bien!!! :)
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