tENgO uNa CoSa qUe mE aRde dENtRo...

A Jon Spencer le podríamos llamar Rey dEsoRdeN sin miedo a equivocarnos. Si mi (lamentable) memoria no me falla, le he visto 7 veces, entre la Blues Explosion y Heavy Trash. Y cada vez que le veo, salgo del concierto sintiéndome enormemente bien conmigo mismo (como esta noche): con la autoestima por las nubes, con ganas de empatizar con mi entorno, sintiéndome sexy (pronto colgaré un documento al respecto)... y sudado, claro. Muy sudado, y oliendo a rock. Por cierto, sensacional la bronca que le ha metido una chica tamaño dEsoRdeN a un subnormal tamaño 3 dEsóRdeNes que iba empujando a todo quisqui, y para acabarlo de rematar, con una mochila que abultaba como 4 chepas de dromedario. Tiparracos como éste me siguen haciendo venir deja vus de otras vidas, de cuando debí ser un psicópata sanguinario sediento de vísceras...

...y eso mismo me ha hecho sentir lo que me ha pasado esta mañana. Ayer no pude pagar la comida con la tarjeta de crédito y no llevaba pasta, así que he ido al cajero a sacar dinero y saldar mi deuda con el restaurante de delante del curro. Y el cajero se me ha tragado la tarjeta. Con mi humor matinal de "no-me-toquéis-los-huevos-que-(para variar)-me-he-dormido-y-llego-tarde", he tenido que soportar una cola de 20 minutos en la sucursal, para que me dieran la maravillosa noticia de que alguien me ha copiado la banda magnética de la tarjeta y ha intentado usarla fraudulentamente. Y como el banco lo ha detectado, por seguridad, ni me dejó pagar ayer, ni me ha devuelto la tarjeta hoy. Mola ver que son efectivos, pero quizás alguien de mi oficina habitual podría haberme avisado de la incidencia para que yo lo supiera. Y, cuando digo avisarme, no me refiero a dejarme un mensaje en el contestador del fijo de casa, sino llamarme directamente al móvil hasta conseguir hablar conmigo. Que, como es móvil, por eso lo llevo conmigo a todos los lados. Y si sus mentes de banquero no llegan para tanto, la otra opción es que cojan el puto teléfono de la oficina a la que he llamado entre 15 y 20 veces durante el día sin que nadie conteste...

...sea como sea, la cuestión es que en unos días me tiene que enviar un duplicado de la tarjeta, y mañana me pasaré por la oficina (si no me duermo...) antes de ir a currar, a que me expliquen qué narices pasa. Más que nada, porqué es la segunda vez en 2 o 3 años que me pasa lo mismo. ¿Algún hijo de perra se piensa que estoy montado en el dólar y se quiere fulminar mi cuenta por la puta patilla? ¿Pero cómo se puede ser así de ruín y mezquino? O te buscas un trabajo, o le robas a los millonarios si tienes narices, hijo de la grandísima...!!! Aaaaggghhhh!!! ¿Por qué narices el ser humano puede (suele) ser tan despreciable? Matar!! Aniquilar!! Asesinaaaaaaaaaarrrrrrrrr!!!!!!!!!!!!!!!!

(Si no fuera por el rock, que me ayuda a calmar a la bestia que llevo dentro...)